Jugadas de mi psique

Aquel día seguía con la sensación de que no estaba sola en casa, mi única explicación es que así como los hechos reales se olvidan también algunos que nunca fueron pueden estar en los recuerdos como si hubieran sido, eso mismo sucedía aquel  día, en los que no me veía a mi misma sola en  casa, sino siempre acompañada  por él,  lo había sentido tan cerca en la noche que percibía  el rubor de su aliento en mi dormitorio, y los latidos de su respiración en mi almohada solo así había entendió que habíamos podido hacer  tanto en tan poco tiempo, me recordaba tendida en la hamaca y le recordaba a él a lado mío,  mirando  al cielo buscando estrellas fugases, le veía cocinar cuidando el mas mínimo detalle en el sazón, recordaba como preparo al día siguiente café mientras  yo dormía. Nunca olvide esa mirada coqueta mientras platicábamos… ¿por que me conociste tan viejo?- me dijo- le conteste la verdad: La edad no es la que uno tiene sino la que uno siente.

(La dama del amanecer)