Eres lo mejor que me pudo suceder

Siendo sincera hace algunos años, pasaba las noches calentando la garganta con tequila, vodka, cerveza ( lo que apendejara -dicho bulgarmente-). Pues los labios los tenía fríos, quebrajados, carcomidos  y escépticos de sentir o incluso de querer probar. Era juerguista en las calles  donde sólo caminan las decepciones o en los bares donde se reúnen los recuerdos, los abrazos rotos y las soñolientas  noches frustradas. Antes había olvidado lo que era leer un libro, sólo firmaba y pagaba cuentas, entre antros y bares  donde podía dar cabida a la soledad y al olvido…. Todo eso se cayó cuando el llego, no sé cuando pasó, no se cuantas hojas le había quitado al calendario, no me fijaba en el tiempo, era sólo su magnifico perfil, sus miradas, la precisión de sus palabras, sus enseñanzas, ese halito  suyo que me deja con los vellos de punta y su melena que me atrae y me antoja mirarlo  desde cualquier perspectiva…… Ahora las palabras se me escapan de las manos  y el tiempo se me hace nada  cada que le escribo,- sin mencionarle pero siempre hablo de él-, Lo pienso y le verso, lo veo y me inspira.-Que en su compañía el café me sabe más delicioso y las tardes mas amenas,  De entre todos los placeres de la vida, él es mi predilecto, me ha mostrado que calentar mis labios y dejar fluir las palabras por la garganta, es lo mejor que me puede suceder.


(La dama del amanecer)